Desde que nació su hija Harper, la retratista profesional Rebecca Leimbach ha estado documentando la creciente amistad entre Harper y Lola, una adorable bulldog Inglés propiedad de la familia. Su amistad tiene un significado especial porque Lola es esencialmente la hermana que Harper nunca tendrá.
Después de muchos años intentándolo, Rebecca finalmente fue capaz de dar a luz a Harper. Por desgracia, pronto se hizo evidente que Harper sería su primera y última hija biológica. Justo cuando ella comenzó a sentirse culpable de que ella nunca podría proporcionar a Harper un hermano/a, se dio cuenta de que habían estado viviendo con uno todo el tiempo: su protectora bulldog llamada Lola.
Estas bellas fotografías de Leimbach plasman su hermosa relación con la vida.
«Ellas tienen un vínculo divertido. Harper ama inmensamente a Lola, excepto cuando se come sus juguetes, lo que sucede muy a menudo. Lola es muy protectora de Harper. Lola trata a Harper como yo creo que ella hubiera tratado a uno de sus propios cachorros», dijo Rebecca a My Modern Met.
Echa un vistazo a las fotos de Leimbach para ver lo integrado que puede estar un perro en el seno de una familia.
Harper no podía tener un hermano o hermana, pero esta bulldog parece llenar ese hueco perfectamente.
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yo creo que la madre esta zumbada….
jajaja…si, la nena no se ve muy contenta y la verdad es que la perra tampoco. Las fotos se ven hermosas, pero nada espontáneas!
Soledad le haces honor a tu nombre, las fotos son encantadoras, y se ven felices ambos. No hay que ser agua fiestas.
no se ven espontaneas las fotos parecen muy estudiadas , esta preciosa la niña y la perra pero nada mas, parece como que la niña le tiene miedo a la perra, o sea que la mama es una mentirosa