Cuando tu bebé y tu perro están creciendo a la par. Cuando son amigos y parecen adentrarse en el terreno de la vida juntos: aprender a jugar, comer, respetar, intercambiar valores, responsabilidad…
Este hermoso cachorro ha sido adiestrado para velar por la seguridad del nuevo miembro de la familia: una niña.
La docilidad del perro, su fidelidad al dueño y la paciencia ante las diabluras de los niños, lo convierten en una excelente compañía para los menores.
Juguetón, buen carácter y fácil de educar son los atributos que lo hacen un compañero ideal, sobre todo si llega a la familia siendo cachorro y se inicia junto con el bebe. Se cuidarán y disfrutaran el uno del otro.
A buen amigo, buen abrigo.