Antes de empezar a beber
1. Tomar más vitaminas.
«Un gran error es pensar que las resacas se deben únicamente a la deshidratación. Sin embargo, las causas principales son la inflamación y el estrés oxidativo. Y es mucho más fácil prevenir una resaca que tratar de mitigarla a la mañana siguiente», dice Jason Burke , un anestesiólogo que ha tratado a más de 20.000 resacas.
Vídeo con unas ideas extra para evitar la resaca:
Los antioxidantes ayudan a mitigar el daño producido por el alcohol. Un aporte extra de vitaminas no nos vendrá mal. Recomendado por el Dr. Burke: beber acai o hacer jugo de granada antes de salir.
2. Pedir una hamburguesa en vez de una ensalada.
La severidad de una resaca no sólo se relaciona con la cantidad alcohol ingerida sino también en cómo se metaboliza dicho alcohol, y eso depende mucho de lo que comas, dice Elizabeth Kovacs, directora del Programa de Investigación del Alcohol de la Universidad de Loyola.
Su sugerencia: asegúrate de comer algo que contenga carbohidratos, proteínas y grasa antes de tu primer sorbo de alcohol.
Por su parte, el Dr. Burke asegura que la carne roja tiene una alta concentración de aminoácidos y vitaminas del complejo B que ayudan a procesar los subproductos desagradables de alcohol.
3. Dormir bien la noche anterior a la ingesta de alcohol.
Dormir bien no te salvará de una resaca pero mejorará tu inmunidad y preparará tu cuerpo para manejar una noche de consumo excesivo de alcohol.
Mientras estás bebiendo
4. Evitar el champán.
La ciencia dice que las burbujas del champán pueden acelerar la absorción de alcohol por lo que puedes emborracharte más rápido. El problema es que esto produce especialmente malas resacas, dice el Dr. Burke.
5. Bebe Gatorade o alguna otra bebida deportiva en algún momento de la noche.
Probablemente hayas escuchado que es bueno beber agua entre copa y copa para defenderse de la deshidratación (y el dolor de cabeza como resultado) causada por el alcohol.
Sin embargo, el agua de coco o las bebidas deportivas como Gatorade funcionan aún mejor: reemplazan los líquidos y electrolitos, los nutrientes que se pierden cuando bebes, dice Kovacs. Alterna una bebida de este tipo cada dos copas.
6. No fumes la noche que bebas.
113 estudiantes universitarios documentaron su consumo de alcohol, el hábito de fumar y los síntomas de la resaca. Los investigadores encontraron que cuando los estudiantes bebían mucho y fumaban a la vez, la severidad de la resaca era aún mayor.
7. Son mejores las bebidas claras que las oscuras o con color.
El vodka y la ginebra tienen menos toxinas e impurezas que las bebidas oscuras como el whisky y el ron, dice Kovacs.
8. Mejor mezclar las bebidas alcohólicas con zumos que con bebidas de soda.
Los zumos de frutas y verduras contienen vitaminas adicionales que no las tienen bebidas como las bebidas de soda.
9. Lávate las manos muy bien.
El consumo de alcohol cambia la forma en que tu sistema inmunológico funciona, por lo que si estás expuesto a algo parecido a la gripe cuando estés fuera de casa tendrás más probabilidades de infectarte, dice Kovacs. Y si hay una cosa que hace que una resaca sea peor, es la gripe.
10. Bebe bebidas alcohólicas de calidad.
Es mejor beber ginebra o vodka de alta gama que no otras marcas más baratas. Si bien esto puede sonar presuntuoso (e innecesariamente caro), el Dr. Burke dice que las marcas de bebidas alcohólicas caras filtra mucho más las impurezas y toxinas, y esto puede hacer que tu resaca sea menos grave.
De igual manera, pagarás más por tus copas y probablemente intentarás beber más comedidamente para que no te salga la noche extremadamente cara.
Antes de ir a dormir
11. No te excedas bebiendo agua.
Es cierto que las resacas pueden ocurrir cuando el cuerpo tiene demasiado líquido del malo (alcohol) en detrimento del líquido bueno (agua). Sin embargo, Kovacs dice que beber demasiada agua antes de acostarte puede suponer un estrés excesivo en tu cuerpo.
Consejo: después de una noche de beber en exceso, puedes beber un vaso de agua antes de acostarte (o dos si estás particularmente sediento), y dejar un vaso lleno en la mesilla de tu cama por si te da sed a primera hora de la mañana.
12. Tomarse un ibuprofeno antes de irse a dormir.
Si realmente se te fue la mano con el alcohol, puedes tomarte un ibuprofeno antes de irte a dormir, dice el Dr. Burke. Los medicamentos anti-inflamatorios (cualquier cosa que contenga ibuprofeno o naproxeno) ataca directamente la inflamación que causa el alcohol. Fuente