Las redes sociales son una plataforma de información para millones de empresas para publicitar e idear estrategias de Marketing, lo que no imaginamos es que también son fuentes para que bancos digitales analicen nuestras finanzas y podamos contar con opciones que antes no teníamos para acceder a un crédito financiero.

El perfil de riesgo
Desde hace años, la forma tradicional de adquirir un crédito supone la presentación de documentación que demuestre la solvencia o avales con los que cuenta el solicitante, para así responder ante las entidades financieras prestadoras que realizan un estudio minucioso y personalizado antes de su aprobación. De esta manera, se reduce el riesgo de incumplimiento de pago. En caso de que el perfil del solicitante no cumpla con el puntaje y requerimientos necesarios, el crédito es denegado.
En la actualidad y con el auge de las redes sociales esto ha cambiado, los bancos online y las fintech, realizan un estudio de riesgo basándose en variables como el tamaño de la pantalla del celular e incluso los tipos de correo electrónicos que tiene una persona para permitir a los usuarios acceder a mini préstamos. Esto permite incluir financieramente a una parte de la población que no estaba siendo tomada en cuenta por falta de información.
Tecnología financiera
Este nuevo modelo de negocio, conocido por su forma anglosajona fintech, se ha producido como respuesta a los sistemas de financiación efectuados a través de Internet. ¿Por qué es importante saber esto? Debido al incremento de este método de transacción, se ha encontrado una forma que permite examinar la capacidad de repago efectiva por parte de los individuos y con una mayor área de acercamiento a través de un scoring que, a diferencia del tradicional, no usa los archivos crediticios de una persona, sino que a través de una serie de preguntas, un logaritmo es capaz de arrojar la cantidad, la tasa y el plazo del crédito en un tiempo reducido y analizando variantes que normalmente no se tenían en cuenta, pero que pueden aumentar la movilidad financiera de una entidad.
Con esto no quiere decir que surge un desplazamiento del criterio habitual de evaluación del puntaje crediticio de la persona, sino que se complementa el método tradicional, pues en todo caso, el sustento del sistema de crédito reside en la capacidad de devolución y ganancia sobre este, de modo tal que la persona debe poder garantizar el reintegro capital y de intereses concedidos. Pero al tener en cuenta dentro del análisis pequeños variables como hábitos de consumo y transacciones en línea, se puede apoyar la suficiencia monetaria de devolución.
Esta forma de análisis más inclusiva categoriza distintos grupos de personas en lugar de uno, a diferencia de las entidades bancarias tradicionales. Esto facilita la creación de un perfil al que se le adjudica un préstamo personalizado según sus condiciones de liquidez favoreciendo tanto al prestamista como al beneficiado, minimizando los riesgos de insolvencia.
Huella digital
La ausencia de un historial crediticio puede ser una factor frustrante a la hora de solicitar un crédito e incluso puede excluir a personas con un alto potencial de responsabilidad financiera, esta razón la han comprendido muchos bancos que en la actualidad han comprado estos sistemas de análisis que incluyen como clientes a personas con una huella digital según su comportamiento en redes sociales. Esto se refleja en un aumento de mini créditos y una disminución de moras en los mismos.
El primer filtro que realizan los expertos matemáticos, desarrolladores, expertos en software entre otros, es la confirmación de la entidad del solicitante. De ahí en adelante, desde la IP hasta la forma en que se expresan al escribir, son analizadas para crear una base con datos suficientes para determinar la viabilidad de la transacción.
Plataformas de asesoramiento
Las entidades prestamistas no son las únicas con derecho a analizar. Junto con la proliferación de los créditos en línea, han surgido plataformas que le permiten al solicitante saber cuál es el mejor postor según sus necesidades y un asesoramiento destinado a orientar al interesado sobre las opciones existentes, requisitos y cuantías referentes a un préstamo, sin tener que esperar demasiado tiempo ni invertir dinero, e incluso se puede adquirir un préstamo para ser saldado en menos de un mes.
Una guía importante que ofrecen estas plataformas es aquella referente a los préstamos rápidos y los personales, pues por generalidad no se conocen las diferencias entre estos, ni cuál nos conviene más según la urgencia y situación en la que nos encontremos.